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Una sola noche

#07 Fervor de Buenos Aires

fervor de Buenos Aires

(Esta es la portada de la edición princeps, ojalá la hubiese leído de esta fuente...los libros tienen alma)

Recientemente salió un coleccionable de estos que siempre aparecen en Septiembre y Enero (los tiempos de los buenos propósitos) con una serie de obras completas de grandes autores de la Literatura Española e Hispanoamericana, y el número dos correspondía a las obras completas (tomo I) ¡de Borges!. Da la casualidad que el año pasado le pedí a los Reyes Magos (que son los que traen regalos a los niños como yo en Navidad, no como ese freak rojo de Papa Noel, que ni es rey ni es nada...) las obras completas de Borges en la clásica edición de Emecé, y no me las pudieron traer porque era prácticamente imposible conseguirlas, estaban descatalogados en España 3 de los 4 tomos que componían la colección. Me trajeron sólo el Volumen II. Por eso ahora me lancé al kiosco en cuanto vi el anuncio, porque esta vez no se me escapan, y encima descubrí que esta edición para el coleccionable es exactamente una reproducción de las Obras Completas de Emecé que fueron mi regalo frustrado. Estoy emocionado. Tanto que me he suscrito al coleccionable, aunque no sé si lo aguantaré todo (al menos Borges, Cortázar y García Lorca me encantaría tenerlos completos).

Las Obras Completas de Borges están organizadas cronológicamente, así que empecé por el principio, por este Fervor de Buenos Aires que escribió Borges con 24 años y que fue su primer libro publicado. Es un poemario donde se empiezan a ver las constantes de Borges (el amor por lo fantástico, el orientalismo, todo enraizado profundamente en su Argentina), pero en estado un poco larvario. Si queréis, tenéis el libro completo aquí. Hay poemas muy buenos (La Rosa es, acaso, el que más me haya gustado), pero no llegan a emocionarme. Cuando terminé el libro, hojeé un poco por el tomo hasta que llegué a Ficciones, y leyendo el principio de Tlön, Uqbar, Orbis Tertius me di cuenta que en Fervor de Buenos Aires queda aún mucho camino para el Borges que me pone los pelos de punta. No os creáis que esto es una crítica. Me ha gustado mucho el libro y lo recomendaría sin dudar, pero cuando has visto el oro, la plata te parece sin brillo, mate. Y sin embargo es plata.

Bon dia

P.D. Domingo de puente, ¡qué placer sin igual!

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