Cuento de Navidad
Hoy paseaba por una calle normal de Valencia, y me han sorprendido los carteles de tres tiendas que estaban puestas una al lado de la otra. Ahora que la gente se precipita a las tiendas desesperadamente, yo no voy a ser menos, quizá encuentre lo que busco en esta Navidad.
La primera era una planta baja de diseño, muy minimalista, con un cartel que decía: "Pepito Pérez" Asesores, con letras preciosas y un logo bien diseñado en Verdana. Y yo me he preguntado: ¿De qué asesorarán estos señores? ¿podría yo entrar en su despacho inmaculado y decirles que necesito asesoramiento para vivir, para seguir viviendo cada día sin preguntarme si todo esto sirve de algo?, aunque creo que no me darán en esa tienda el asesoramiento que yo busco.
La segunda tienda no era minimalista, más bien kitsch. Decía "Elena Pepitez" Centro de Estética. ¿Qué Estética? ¿Puedo entrar aquí como en un ágora y pedir consejo a Aristóteles sobre la busqueda de la belleza? ¿O es esto un cementerio de pelos, pellejos y aceites para adornar lo que no es importante?.
La tercera tienda tenía un cartel negro, con letras amarillas: "La atalaya Warhammer, cartas, juegos de rol.". Quizá aquí encuentre lo que busco, o tal vez sólo me proporcionen una huída a la fantasía, "un escapismo de nata y pistacho", como diría Libertad.
Desesperarse y perder el sentido, buscar la belleza, huír de la realidad. ¿Son esas las tres opciones que me quedan?
No sé si hay más tiendas en esta calle, a lo mejor no he buscado bien...
Feliz Navidad
Bona Nit.
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