No llego, no llego...
La verdad es esta. Leo diariamente desde mi agregador 126 blogs, que producen unos 300-400 posts nuevos al día. Es evidente que no todo lo leo, pero si lo repaso, post por post, aunque sea sólo el título. Me paso una media de 2 horas diarias leyendo blogs. Desde que compré el Mac, leo blogs mientras hago otras cosas como ver la tele o leer, pero aún así, paso demasiado tiempo con ellos.
Me encanta leer blogs. Como leí en uno de ellos, uno mismo se siente estúpido cuando ve que hay siempre alguien ahi fuera más inteligente, más salado, con más fuerza, constancia o desparpajo que uno. Hay que empezar a asumirlo, que aunque seas la bomba en algo, siempre habrá alguien que lo haga mejor que tú. En la blogosfera encuentro todas esas personas mejores que yo en casi todos los ámbitos. Y eso me enriquece porque aprendo de todos y se me abre la vida a cosas nuevas que nunca sabría de otra manera.
El problema es que mi productividad se resiente exponencialmente. Podría dedicar esas horas a traducir libros que me gustaría traducir, a leer, a hablar con mi mujer, que me tiene que soportar con el ordenata sobre las piernas durante todo el rato que va desde que cenamos hasta que nos acostamos. Podría preparar las mil cosas que tengo pendientes en mi trabajo y para las cuales nunca encuentro el tiempo. ¡Dos horas dan mucho de sí!
Pero no puedo dejarlo. El ver la etiquetita de Newsfire parpadeando con el número de posts sin leer es superior a mis fuerzas.
Bona nit
Me encanta leer blogs. Como leí en uno de ellos, uno mismo se siente estúpido cuando ve que hay siempre alguien ahi fuera más inteligente, más salado, con más fuerza, constancia o desparpajo que uno. Hay que empezar a asumirlo, que aunque seas la bomba en algo, siempre habrá alguien que lo haga mejor que tú. En la blogosfera encuentro todas esas personas mejores que yo en casi todos los ámbitos. Y eso me enriquece porque aprendo de todos y se me abre la vida a cosas nuevas que nunca sabría de otra manera.
El problema es que mi productividad se resiente exponencialmente. Podría dedicar esas horas a traducir libros que me gustaría traducir, a leer, a hablar con mi mujer, que me tiene que soportar con el ordenata sobre las piernas durante todo el rato que va desde que cenamos hasta que nos acostamos. Podría preparar las mil cosas que tengo pendientes en mi trabajo y para las cuales nunca encuentro el tiempo. ¡Dos horas dan mucho de sí!
Pero no puedo dejarlo. El ver la etiquetita de Newsfire parpadeando con el número de posts sin leer es superior a mis fuerzas.
Bona nit
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